Quizás escucho la frase…Mi hijo no está loco…
Son cosas de niño eso se le pasa… Para que voy a llevar mi hijo a un
psicólogo?
El psicólogo es un profesional que pone sus
conocimientos a disposición de la persona que acude a su consulta, con el fin
de ayudarla a resolver un problema. También
ayuda a ver las cualidades que posee como ser humano para aprovecharlas.
Proporciona recursos y estrategias para que el paciente pueda tener una vida
saludable y plena.
La existencia de enfermedad mental infantil
puede sorprender al adulto que piensa que los niños están, de algún modo,
protegidos. Pero lo cierto es que actualmente estos trastornos se están
convirtiendo en foco de atención importante por su frecuencia y gravedad. Esto
también es debido a que, en ocasiones, pueden ser precursores de problemas
psicológicos en la vida adulta.
¿Es necesaria la figura de un psicólogo
escolar?
La respuesta es sí. Debido a las diferentes circunstancias de
acoso escolar, trastornos de
personalidad, bipolaridad, estrés en niños y niñas, depresión, violencia. Los docentes
se encuentran atados de manos para el manejo de emociones y conductas que deben
ser canalizadas por un especialista. Los psicólogos escolares son profesionales
capacitados en psicología clínica y en educación. Su trabajo consiste en
trabajar con los padres, maestros y otros profesionales dentro de las escuelas
para garantizar que todos los estudiantes aprendan en una ambiente saludable y
seguro.
Igualmente, ellos ayudan y acompañan a los
niños a enfrentarse a su vida escolar y cualquier reto que ello implique
ofreciéndole a la comunidad educativa información, educación y estrategias para
ejercitar la salud mental.
¿Cuál es el trabajo del psicólogo escolar?
El psicólogo escolar tiene múltiples
actividades y funciones dentro de la escuela, ya que el presta consultoría,
ofrece distinto tipos de evaluaciones, ofrece intervención oportuna en
asesoramiento psicológico, colabora con los temas de prevención en temas de
salud mental, desarrolla conjuntamente con el resto del personal docente
programas educativos, y además, investiga y planifica programas académicos.
Entre sus labores más relevantes son:
1. Colaborar con los maestros, padres y
administradores de la escuela para encontrar soluciones efectivas a los
problemas de aprendizaje y de conducta de los estudiantes.
2. Evalúa la elegibilidad para servicios
especiales y las destrezas académicas y la aptitud para el aprendizaje.
3. Ofrece asesoramiento psicológico para
ayudar en la resolución de interpersonales o de familia que interfieran con el
desempeño escolar.
4. Diseña programas para evitar la deserción
escolar de los niños y ayuda a promover la tolerancia, la comprensión y el
aprecio de la diversidad dentro de la comunidad escolar.
5. Educa al personal de la escuela sobre cómo
trabajar con estudiantes con impedimentos o con talentos especiales, o con
aquellos que tengan problemas de abuso de drogas y otras sustancias.
6. Evalúa los programas académicos y el
manejo de la conducta dentro de la escuela.
¿Por qué es importante comunicarse con el
psicólogo escolar?
Cuando la mayoría de los padres asocian al
psicólogo escolar con la labor de proporcionar consejería psicológica en la
resolución de problemas interpersonales o de familia que interfieren con el
desempeño o la vida escolar de su niño, lo cierto es que el este profesional
también es vital para enterarse de la elegibilidad de los servicios especiales
que ofrece la escuela, así como de la información académica para que su niño
pueda avanzar en su entorno educativo próximo (escuela, liceo, universidad)
como su relación social y familiar. Además de manejar crisis, él es la persona
idónea para aprender sobre estrategias efectivas de enseñanza y aprendizaje,
entre otros aspectos. Suministrando ayuda a la familia y a los docentes para
trabajar de forma articulada escuela-familia.
¿Qué debo hacer como padre o madre si el colegio no cuenta con un psicólogo escolar?
De no existir psicólogo escolar los padres
deben complementar con psicólogos clínicos el proceso de formación de sus hijos;
evitando la negación. Cuando en la escuela los docentes observan un niño o niña
que no controla sus emociones, conducta y que este tiene dificultades en su
ritmo de aprendizaje, es necesario que los padres acudan a una consulta con el psicólogo
para hacer una evaluación respectiva.
Hasta hace poco se pensaba que los trastornos
afectivos no aparecían antes de la mitad o el final de la adolescencia y, sin
embargo, actualmente se acepta que prácticamente todos los trastornos
psiquiátricos del adulto pueden tener su inicio durante la niñez o la
adolescencia. Hay que considerar que la
forma en que los niños los manifiestan puede ser diferente a la de los adultos,
porque la infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir
Debemos reconocer que el proceso de intervención psicológica no tiene resultados inmediatos, esto lleva un proceso. Pero podemos considerar que iniciar la evaluación y el seguimiento, es el primer paso para mejorar y ayudar a su hijo (a) a convertirse en un ser estable emocionalmente y conocedor de sus habilidades, fortalezas, destrezas para que tenga un futuro maravilloso.