Los estudiantes y docentes podrán
encontrar en el mapa mental una herramienta muy útil para evitar la rigidez del
pensamiento, al expandir la creatividad a través de la producción y asociación
de ideas en una estructura creciente y organizada de patrones.
Roger Sperry, investigador en
Neurociencia del Instituto Tecnológico de California, planteó la división
cerebral en dos estructuras: los hemisferios derecho e izquierdo. A su vez,
Paul MacClean, jefe del Laboratorio de Evolución Cerebral y Comportamiento del
Instituto Nacional de Salud Mental de California, en su teoría del CEREBRO
TRIUNO ha establecido que dentro del cráneo existen tres cerebros en uno o
triada cerebral, esto es, que hay tres sistemas neuronales interconectados;
pero que física, química y evolutivamente son diferentes, separados uno del
otro por innumerables generaciones. Estas estructuras mentales están
superpuestas una sobre la otra, de acuerdo con su proceso evolutivo, y se
clasifican, según el referido autor, en los siguientes módulos:
Con las investigaciones de Roger
Sperry y de Robert Ornstein sobre los hemisferios izquierdo y derecho se
concluye que a las técnicas de tomar apuntes se les debe incorporar el uso de
ambas estructuras mentales, es decir, que a las palabras, números, secuencias,
orden y líneas, hay que agregarles colores, imágenes, dimensiones, símbolos,
ritmos visuales e, incluso, exageración, contracción y absurdidad.
La naturaleza de los mapas
mentales se relaciona profundamente con la naturaleza multimodal y
multifuncional de la mente humana. Por esa razón son muy útiles en cualquier
actividad en la que se involucre la memoria, la planificación y la creatividad,
como es el caso en el diseño de discursos, tomar apuntes, presentar exámenes,
redactar un libro o una tesis. Estas herramientas pueden abarcar desde las
primeras lecciones escolares hasta un gran proyecto científico.
Un mapa mental es un diagrama
usado para representar las palabras, ideas, tareas y dibujos u otros conceptos
ligados y dispuestos radialmente alrededor de una palabra clave o de una idea
central. Los mapas mentales son un método muy eficaz para extraer y memorizar
información. Son una forma lógica y creativa de tomar notas y expresar ideas
que consiste, literalmente, en cartografiar sus reflexiones sobre un tema. Se
utiliza para la generación, visualización, estructura, y clasificación
taxonómica de las ideas, y como ayuda interna para el estudio, planificación,
organización, resolución de problemas, toma de decisiones y escritura.
Un mapa mental se obtiene y desarrolla alrededor de una palabra o texto,
situado en el centro, para luego derivar ideas, palabras y conceptos, mediante
líneas que se trazan hacia alrededor del título; el sentido de estas líneas
puede ser horario o anti-horario; es un recurso muy efectivo para evaluar la
relación entre distintas variables.
¿CÓMO PUEDO ELABORAR UN MAPA MENTAL?
Materiales Necesarios:
La información completa que se
utilizará: libros, apuntes, revistas, de internet, enciclopedias, artículos,
etc.
Papel en blanco (hojas cartas,
oficios, papel bond), reglas, plantillas de diversas formas y figuras,
marcador, rotulador, tizas, lápices, compás.
Leer primero todo el material
para conocer la totalidad de la información, para analizar los puntos
principales del contenido, saber cuántos subcentros tendrá el mapa y la
profundidad que ha de tener el manejo de la información.
Seleccionar los colores e
imágenes que se usarán para resaltar las
ideas más importantes en el material escrito en el mapa, siempre las imágenes y
dibujos deben tener relación con lo que deseamos expresar en el contenido.
Pasos para su Elaboración:
Colocar la hoja de papel blanco
horizontalmente, ya que esta posición permite mayor facilidad para escribir y
la distribución de espacio.
Diseño del centro: Es el origen de las ideas y punto fundamental en
el mapa que dispone de espacio alrededor para expandirse. Debe ser visualmente
llamativo en color, tamaño, y contenido, para lo cual pueden combinarse
imágenes y palabras interrelacionadas armónicamente.
Organización: Permite distinguir las ideas, clasificándolas y
relacionándolas de acuerdo con los vínculos informativos que permitan
establecer conexiones, manteniendo el orden, la jerarquía de ideas y la
claridad visual.
Agrupación: Si se parte del centro, la información puede
clasificarse en forma irradiante, mediante el uso de subcentros para que el
material sea organizado en un número de partes, fácilmente recordable, que
estimule la memoria inmediata.
Asociaciones: Las palabras, ideas e imágenes asociadas entre sí
permiten ser recordadas simultáneamente. La asociación se realiza uniendo estos
elementos mediante flechas, líneas, vínculos, tomando en cuenta su proximidad.
Imaginación: Es un poderoso recurso del hemisferio derecho que
desarrolla el pensamiento creativo, al procesar la información existente para
la generación de nuevas ideas en forma espontánea. Las ideas creativas surgen
cuado la mente se encuentra relajada.
Imágenes visuales: Son más fácilmente recordadas que las palabras,
por lo tanto, tienen mayor impacto en la memoria que la escritura. Hay que
recordar que “una imagen dice más que mil palabras”.
Tipo de letra: Las palabras escritas en letra de imprenta facilitan
la lectura y la visualización, evitan la confusión entre palabras similares y
simplifican el recuerdo y ocupan menos espacio.
Uso de
palabras claves: Son sustantivos, verbos y adjetivos relevantes en el tema
que establecen relaciones entre los diferentes aspectos.
Uso de colores: Rompe con la monotonía y es fundamental para la
estimulación del recuerdo, la memoria, la creatividad, la motivación y el
entendimiento. El color activa el cerebro.
Claridad: La información presentada debe reconocerse con facilidad
y ser visualmente clara para que el cerebro la pueda recibir y procesar con
efectividad.
Divertido: Hacer un mapa
mental entretenido permite romper con la rutina, despertar la motivación,
además proporciona disfrute y placer al diseñarlo.
Abarcar
todo el cerebro: La creación de un mapa mental involucra ambos hemisferios,
por lo que ayuda a desarrollar todo el potencial de la mente, al aplicarse las
dos formas de pensamiento: el lineal y el espacial.
Resaltar: Se destacan los elementos más importantes al utilizar
distintos recursos visuales que incorporen luz y vida en las palabras e
imágenes.
Símbolos: El uso de ellos sirve para reemplazar palabras o ideas.
Son altamente visuales y permiten identificar con facilidad la palabra
representada, ahorrando tiempo en el proceso.
Dimensión: Se aprovecha lo sobresaliente de las imágenes
volumétricas para destacar la información y las imágenes más importantes.
Dibujo: Consiste en transformar en imágenes la información escrita,
lo que resulta de gran provecho para
estudiantes visuales.
Algunos modelos de mapas mentales sencillos:
¿Qué es un Mandala?
El
mandala, palabra sánscrita cuyo significado literal es círculo, es una
representación simbólica y arquetípica del universo según la antigua cosmología
budista. Está constituida por un conjunto de figuras y formas geométricas
concéntricas; representa las características más importantes del universo y de
sus contenidos. Su principal objetivo es fomentar la concentración de la
energía en un solo punto durante la meditación.
Los
mandalas son utilizados desde tiempos remotos. Tienen su origen ancestral en la
India (imágenes y meditaciones budistas) pero pronto se propagaron en las
culturas orientales, en los indígenas de América y en los aborígenes de
Australia. La mayoría de las culturas poseen configuraciones mandálicas,
frecuentemente con intención espiritual: la “mandorla” –almendra- del arte
cristiano medieval; ciertos “laberintos” en el pavimento de las iglesias
góticas, los rosetones de vitral de las mismas iglesias góticas…
En
la cultura occidental, fue Carl G. Jüng (1875-1961) quien los utilizó en
terapias con el objetivo de alcanzar la búsqueda de individualidad en los seres
humanos. Jüng solía interpretar sus sueños dibujando un mandala diariamente, en
esta actividad descubrió la relación que éstos tenían con su centro y a partir
de allí elaboró una teoría sobre la estructura de la psique humana.
Según
Carl Jüng, “los mandalas representan la totalidad de la mente, abarcando tanto
el consciente como el inconsciente”. Afirmó que el arquetipo de estos dibujos
se encuentra firmemente anclado en el subconsciente colectivo.
Para
Jüng “el mandala es una forma arquetípica”, de ahí que aparezca en diferentes
culturas lejanas entre sí, considera que la comprensión del arquetipo puede
resultar curativa.
Justificación Psicoevolutiva
Siguiendo
a Piaget, Wallon y Erikson, entre otros, el niño pasa por varios estadios de
desarrollo hasta convertirse en adolescente y finalmente adulto. No hay
homogeneidad en las clasificaciones, pero si en la denominación de tres fases
de desarrollo: infancia, niñez, adolescencia. Son tres tipos de inteligencia
distintas, tres maneras de abordar la realidad.
Para
Jean Piaget (1896-1980), prestigioso psicólogo conductista, todo el desarrollo de la inteligencia está en
un proceso de estimulación entre los dos aspectos de la adaptación al medio, la
asimilación y acomodación. Cuando un niño nace, dispone de una capacidad de
desarrollo de potencial intelectual. El hecho de que pueda llegar más o menos
lejos va a depender básicamente del esfuerzo que él haga, pero este esfuerzo va
a estar condicionado por los estímulos que les ofrezca su entorno. La rapidez
del avance, a través de los períodos de desarrollo de la inteligencia, está
influida por el entorno sociocultural, aun cuando el orden de los estadios o
fases permanezca inalterado. La mejor ayuda al desarrollo del niño es un medio
ambiente que le estimule, que le resulte atractivo y gratificante.
Para Henri Wallon (1879-1962), psicólogo neoconductista y afamado neurólogo,
la evolución es un proceso más discontinuo, con crisis y saltos apreciables,
tiene un enfoque más pluridimensional. En la mayoría de los casos, la pintura
puede tener un efecto preventivo, ya que por medio de ella los niños aumentan
la conciencia de sí mismos y pueden superar las crisis de su desarrollo con
mucha más facilidad.
Para
Erik Erikson (1902-1994), psicoanalista norteamericano, el desarrollo se basa
en los aspectos psicosociales del proceso evolutivo humano, la vida gira en
torno a la persona y el medio. Cada etapa es avance o regresión de otras
etapas.
Cuando
hablamos de inteligencia hablamos también de creatividad infantil; en la
escuela habrá que tener en cuenta que ésta se manifiesta y fomenta por medio de
actividades expresivas, básicamente a través de la expresión dinámica (actividades
lúdicas, el juego) y la expresión plástica (dibujo, pintura).
Sin
descuidar la primera vamos a centrarnos en la segunda de las acepciones,
introduciendo los mandalas como instrumento educativo para fomentar y
desarrollar la creatividad en la escuela mediante el dibujo y la pintura, con
un triple objetivo: Desarrollar los sentidos y la capacidad de percepción;
fomentar la iniciativa personal, y estimular la imaginación favoreciendo la
libre expresión.
Objetivos por ámbitos
En el ámbito cognoscitivo: Desarrollar la fluidez, flexibilidad
y originalidad en las ideas del niño.
En el ámbito afectivo y
social: Desarrollar
actitudes creativas frente a distintas situaciones que se le presenten.
En el ámbito psicomotor: Favorecer que el niño se exprese de forma
creativa con el uso de distintas técnicas plásticas.
Vamos
a centrarnos en aquellos aspectos de desarrollo que más nos interesan para
introducir el tema de los mandalas a nivel
psicopedagógico y didáctico. No importa el enfoque psicoevolutivo que sigamos,
todos ello coinciden en que el éxito de la educación se logra cuando los niños
se encuentran capacitados para enfocar la vida por sí mismos.
Ya
desde el primer ciclo de Primaria comienzan a mostrarse la adquisición y
desarrollo de algunas destrezas en el
niño. Las habilidades psicomotoras van aumentando hasta fines de la
adolescencia (utilizar lápiz, escribir en pizarra, pintar dibujos, hacer
dibujos, emplear instrumentos, juegos y deportes, bailes…). Además “el
desarrollo de la creatividad debe de ir parejo al de la inteligencia”
(Guilford, 1950). Se han podido establecer altas correlaciones entre
creatividad e inteligencia. La educación ha de contribuir al desarrollo de la
creatividad a través del lenguaje, el juego y la libre expresión creativa de
los trabajos escolares para el desarrollo cognitivo y social más pleno.
Teniendo
en cuenta todo lo anteriormente expuesto, la introducción de los mandalas en la
Escuela deberá hacerse no sólo desde el área de Educación Plástica, sino como
forma de expresión entroncada en todo el Currículo oficial de la Educación Primaria.
Los
mandalas ayudarán a la formación de la inteligencia, del razonamiento, del
control y dominio del cuerpo, todo ello desde un prisma de predominio del
pensamiento divergente o creativo.
1. Mandalas infantiles
como estímulo al aprendizaje.
Todo
es posible si el niño tiene estímulos. O. K. Moore ha demostrado que cualquier
niño es capaz de alcanzar un nivel de rendimiento notable que sólo es posible
si al niño se le confronta con los estímulos necesarios. Los MANDALAS suponen
un estímulo motivador para cualquier aprendizaje de las distintas áreas del
Currículo de Educación Primaria.
2. Mandalas infantiles
como medio de expresión.
A
través del dibujo, del color, el niño se
expresa. Expresa su mundo interior, pensamientos, ideas, estados de ánimo y
relaciones con el mundo de un modo cada vez más complejo, desde los primeros
garabatos a las creaciones artísticas más abstractas y elaboradas desarrollando
con ello su psicomotricidad. Algunos autores actuales como Stern, Lowenfeld o
Arheim han estudiado las formas de expresión del niño a través de la Expresión
Plástica, afirmando su estrecha relación con el desarrollo integral del niño.
3. Mandalas infantiles
como medio de comunicación.
El
niño utiliza los recursos de la Expresión Plástica para desarrollar procesos de
comunicación, tanto más ricos cuanto más lo sea el medio y los recursos que le
estimulen y le orienten. A través de formas y colores utilizados con una u otra
intención el niño busca comunicarse con los demás, comunicar su interpretación
de la realidad, proyectar sus impresiones. A través de las imágenes de sus
dibujos, de las producciones de sus pinturas, el niño intenta comunicar a sus
interlocutores la realidad de un mundo interno que necesita compartir con los
demás.
4. Mandalas infantiles
como medio de producción.
Desde
los garabatos, los remolinos, esferas a las producciones de mandalas más
elaboradas, el niño va evolucionando en su creatividad productiva y habilidad
psicomotriz.
En
un análisis de la producción gráfica, Arnheim observa que los ángulos
sustituyen a curvas, la continuidad a la discontinuidad, comenzando por el uso
de figuras esféricas para pasar después a trazos rectos.
La
producción plástica deberá ser tenida en cuenta como una faceta importante del
desarrollo integral del niño en todas las edades.
5. Mandalas infantiles
como técnica de relajación.
Un
adulto ante un problema puede verbalizarlo expresando así sus sentimientos. Un
niño se relajará utilizando un tipo de
expresión no verbal ya que no saben expresar con palabras sus sentimientos,
puede entonces usar otro medio que no sean las palabras.
La
actividad creativa de los mandalas en estos de niños tensos, introvertidos y
con tendencia al aislamiento es muy útil.
Tradicionalmente
la educación es analítica, todo tiene una relación de causa a efecto, los
procesos siguen una lógica definida. Con ello se trabaja casi en exclusiva el
hemisferio cerebral izquierdo que procesa la información verbal, que codifica y
decodifica el habla.
Se
ha dado muy poca importancia al hemisferio cerebral derecho que se dedica a la
síntesis, combina las partes para formar un todo. La expresión en este
hemisferio no es verbal, es por imágenes. Actualmente se dedica más tiempo a la
expresión plástica, a la creatividad y a la expresión artística .Trabajar la
educación artística de forma sistemática es abrir al niño a un mundo en que la
fantasía y la percepción multisensorial
serán para él nuevas posibilidades de enriquecimiento y de expresión.
Aprender
a percibir la belleza es fundamental ya que estimula el desarrollo integral de
las capacidades humanas, que muchas veces quedan limitadas a lo estrictamente
analítico.
Las
técnicas de relajación son un medio indispensable de educación que lleva
progresivamente al dominio de los movimientos y, como consecuencia, a la
disponibilidad del ser entero.
6. Mandalas infantiles
como medio de superación de situaciones emocionales negativas (fobias, ansiedad,
temores nocturnos, acosos escolares, experiencias traumáticas).
Mientras
se pinta en el subconsciente desaparecen los problemas porque nos encontramos
en un estado de total relajación y concentración. Las respuestas de reacción a
estados emocionales negativos van desapareciendo y poco a poco se transforman.
Para el niño pintar o crear mandalas
puede ser un medio de autoterapia.
Por
todo lo anteriormente expuesto, como docentes consideramos que no se debe
desdeñar la importancia de los mandalas como un instrumento educativo más de
importante valor psicopedagógico. Recomendamos la práctica en las escuelas, a
todos los niveles y desde todas las áreas; en un mundo como el nuestro cada vez
más carente de valores no está de más ayudar a que nuestros alumnos descubran
su mundo interior y canalicen de forma positiva sus energías.
Algunos modelos de mandalas sencillos:
CRITERIOS DE EVALUACIÓN