La Importancia del Juego de Ajedrez en el Proceso de Aprendizaje de los Niños y Niñas




El ajedrez, que tiene una imagen muy positiva ligada a la inteligencia, es un magnífico entrenamiento mental, ya que potencia en los niños multitud de habilidades relacionadas con las matemáticas, la lectura, la capacidad de concentración o la creatividad.

Considerado como juego, deporte o una de las más interesantes creaciones del ingenio humano, esta milenaria actividad concita un inusual consenso en su consideración como una herramienta pedagógica de gran utilidad.

Un estudio de la Universidad de Trier (Alemania) demostró que los alumnos que sustituían una hora semanal de matemáticas por ajedrez obtuvieron posteriormente mejores notas en matemáticas. El ajedrez ayuda a desarrollar la lógica matemática, el análisis y el cálculo mental de los alumnos.

Los niños ajedrecistas leen mejor. Estudiantes de Nueva York que participaron en un programa de ajedrez desarrollaron su capacidad de lectura mucho más que los que no lo practicaron. Esto se debe en parte a que este deporte potencia mucho la capacidad de concentración, pero también a que automatiza en el cerebro habilidades relacionadas con el reconocimiento y la asociación de signos que se usan también en la lectura.

Activa las áreas cerebrales relacionadas con la creatividad y la potencia considerablemente. Los problemas que se plantean durante una partida de ajedrez se pueden resolver con el análisis, pero en muchas ocasiones se recurre a procesos relacionados con la creatividad, la originalidad y la intuición.

Practicar este deporte mejora la memoria, ya que para ser un buen ajedrecista se debe recordar cómo han jugado los oponentes en partidas anteriores y también los movimientos que han ayudado a ganar previamente.

Este deporte es tan exigente mentalmente que un jugador enfrascado en una partida interesante puede aislarse por completo del ruido exterior.

Potencia la capacidad de solucionar problemas con límite de tiempo y bajo presión. Enseña a visualizar mentalmente diferentes itinerarios posibles y calcular las consecuencias de cada movimiento en un escenario cambiante.


El ajedrez no es sólo útil para los más pequeños. Se ha propuesto también para muchos otros usos sociales, como por ejemplo prevenir el Alzheimer. Un buen número de especialistas y estudios científicos sugieren que su práctica frecuente contribuye a mitigar el envejecimiento cerebral y podría retrasar durante años esta enfermedad. Es un excelente gimnasio mental.