Esta
se basa en los principios de la Modificación de la Conducta.
Consiste básicamente en la retirada de atención
que recibe el niño tras realizar episodios agresivos, conductas inadecuadas, separándolo físicamente del
espacio actual para trasladarlo a otro lugar por un breve espacio de tiempo que
le permita reflexionar y calmarse.
El tiempo fuera es una técnica que ayuda a
controlar conductas donde hay episodios de rabia e ira, a no usar la manipulación.
No puede aplicarse por mucho tiempo, hay que
aplicarla muy bien para que no se confunda en castigo.
Ayuda al niño a analizar lo que hacen.
A discernir entre lo bueno y malo.
Antes de iniciar el padre o madre debe
explicarle al niño claramente el funcionamiento de la técnica respondiendo las
preguntas básicas del "dónde", cuánto tiempo, para "qué" además de
marcarle cual fue la conducta inadecuada.
El momento del tiempo-fuera debe ser
“silencioso”. No es el momento para sermones, explicaciones, o retos.Cuando el
tiempo-fuera se termina, se le explica brevemente al niño cómo queremos que se
comporte en el futuro y simplemente, se sigue con las actividades del día.Los
tiempos fuera se utilizan a menudo como una forma para que los padres se calmen
cuando sus hijos se han portado mal y de reflexión para los niños.
El tiempo fuera normalmente se calcula en base a
un minuto por año del niño con un máximo de 20 minutos. No se aconsejan tiempos
más largos ya que pueden producir la conducta contraria a la que queremos
eliminar.
Recuerde reforzar verbal y físicamente, cuando
el niño va mejorando su conducta a través de halagos, abrazos, manifestación de
alegría.
Algunos vídeos de referencia de cómo se aplica esta técnica: