Científicos han
observado que el incremento de los niveles de dióxido de carbono puede afectar negativamente el aprendizaje de
los humanos, provocando la decadencia de
nuestras capacidades cognitivas.
Según el estudio
realizado por la Escuela de Salud Pública de Colorado y la Universidad de
Pennsylvania; indica que las capacidades cognitivas de los estudiantes decaerán
en un 25% para el año 2100. Y el más negativo señala que se reducirán en un
50%.
Esta es la primera
vez que es analizado el impacto en las personas que respiran niveles de dióxido
de carbono superiores a lo normal de manera regular.
La nueva
investigación, publicada por los científicos en EarthArXiv, demuestra que a
medida que los niveles de CO2 continúan aumentando, surge otro preocupante
efecto negativo: el pensamiento confuso: es decir que se pierde la capacidad
para pensar con velocidad, claridad o coherencia normales.
Reducir el gasto
energético, y por ende, menor emisión de gases de CO2 nos puede ayudar a evitar
estos impactos negativos. ¿Cómo? Por ejemplo usando luces led, cuidando y no
malgastando el agua (menos agua caliente), y empleando electrodomésticos,
televisores, computadores y otros, con sellos de alta eficiencia energética
(A+), y obviamente, apagar los aparatos electrónicos cuando no se estén usando.